DEDICATORIAS DE ALGUNOS
HERMANOS HACIA LA SANTA CRUZ DE ARRIBA
EL DIA DE LAS CRUCES.Es un día en el que llantos y alegría van unidos, en el que millones de sensaciones recorre mi cuerpo.
Todo empieza de por la mañana, muy temprano, cuando la banda pasa por todo el pueblo despertando a todos para anunciar que es el día, que es ese día tan querido por los cruceros.
Cuando llega la hora de verla salir siento una sensación inexplicable, me llena de orgullo tenerla ahí enfrente de mí,un año mas, reluciendo con el sol como solo ella sabe hacer, llenando de alegría el rostro de todos , todos los que la queremos, los que sentimos una gran devoción por ella.
La tristeza también forma parte de ese día. Mientras está por la calle recuerdo a todas aquellas personas que eran muy cruceras, que la queria como yo y que ya no están. Gente que siempre han luchado durante todo el año para que el día ese salga brillando mas que nunca, que han ayudado para que su verbena y el día de la procesión salga bien y todos los demás disfrutemos.
Cuando llega a su calle es un momento muy bonito, inigualable. Los hermanos la cogen de rodilla meciendola a un solo compás. Al llegar a la puerta donde la espera el antiguo madero, hacen las caidas y los arriberos levantan a la santa cruz hacia el cielo.Un viva tras otro acompaña el momento.
Al llegar a la puerta de mi tia una gran sorpresa me dí. Una de las pequeñas de la familia se monto en el balcón y con mucho sentimiento hecho un viva, un viva que nunca olvidaré. Fué el primero que le escuché y me lleno de orgullo el saber que los mas pequeños van cogiendo devoción y fé por ese madero que en nosotros simboliza tanto.
La sorpresa no acaba ahí, a unos pocos metros de escuchar ese viva que tanto me llegó, escuche otro, otro de la hermana (una ya no tan pequeña ), que me puso los pelos de punta. A ella si le habia escuchao ya mas vivas, pero siempre me emociona, siempre, porque ella es una gran crucera. Con solo unos 12 o 13 años no falta nunca, siempre esta ahí, para ayudar en lo que haga falta.
Cuando llegó a mi puerta me sentí muy satisfecha. Porque no solo habia vivido momentos emocionantes a lo largo del recorrido, también habia llegado mi momento, ese momento en el que todos los años mi abuela nos escucha echar vivas tanto amí como a mis hermanos.
Este año a sido un buen año, un año en el que los momentos bonitos abundaban, momentos como esa gran petalada.
Petalos blancos cayendo del cielo y gente cantando y echando vivas y una marcha bonita sonaba, bajito, mientras una voz de un balcon se escuchaba y la gente viva contestaban. Y de pronto la parte baja acabá y pétalos del cielo caian para adornarla.
Yá acaba el día. Finaliza con una bonita estampa. LLegando al ayuntamiento se ve mujeres revolucionadas por llevarla.
Gracias a dios yo una de ellas, tuve suerte de coger un sitió en el banzo y poder llevar su peso sobre mis hombros un año más.
Este día yo no lo cambió por "ná".
Viva la santa cruz de ARRIBA!